domingo, 28 de febrero de 2010

Será cierto que la cotidianidad es la prueba de fuego (o la pasas o no hay historia). La nuestra es una historia añeja de cotidianidades diarias. De rituales. De secretos compartidos. De guiños. De complicidades.

Ayer se fue a Uxmal y no dejó de pensar en ella. Una gripe producto del estrés. Sus dudas alrededor del viaje. Es sólo un fin de semana. Te va ir bien como siempre, ya verás, le dije antes de bajar de su auto.

Leí su texto, un adelanto de la crónica que se publicará mañana. La orquesta dará un concierto: la noche de los mayas. Es la pieza perfecta para una ciudad construida tres veces, eso significa Uxmal, también lo que está por venir. El futuro. Mirar el cielo y escuchar música es una invocación a los dioses, es eso, le dijé.
Sí, ya lo sé, pero el texto ¿funciona?, ¿tiene color?, ¿es atractivo?
Contesté sus dudas puntualmente. La observé con ternura durante el trayecto de la oficina a la casa.
Creo que tengo fiebre, ¡Tócame la frente?, ¡anda!
Acerqué mi mano a su rostro, a su piel suave y tibia, acerqué mis labios a su frente. Hubo un largo silencio, después la luz verde indicaba que debíamos continuar nuestro rumbo. Mañana me contará de sus andares por las calazadas de piedras blancas. Cruzará el tiempo. Y yo estaré con ella.

miércoles, 24 de febrero de 2010

"Writing as a form of prayer"
Franz Kafka

martes, 23 de febrero de 2010

Y sucedió.
Y corrí y grité.
Y nadie estaba ahí.
*
Ella me tocó el hombro derecho y se disculpó. Esa es la imagen.
*
Él entró al salón y todos permanecimos en silencio. Nos observó por segundos y dijo: abran las ventanas. El sofoco. Esa es la imagen.
*
¿Quién es el sujeto del derecho?, ¿Cuál es el paradigma? miré la pizarra luego la ventana the wall, the wall

desperté!
¿Y sucedió?!
otra vez los puentes
Y corrí (corrí, corrí)
La imagen, su imagen dimensionada se fragmento en el aire.
Y grité.
Nadie estaba ahí.
*
me soñé huyendo/cruzando esos puentes
una ciudad ruinas polvo cenizas blancas
*
Ella dijo que venía del Palacio Legislativo
el debate, la homologación de las leyes para los estados
conocen a los senadores, a sus diputados preguntó.
entonces otra vez el silencio
*
me soñé huyendo/cruzando esos puentes
una ciudad ruinas polvo cenizas negras
*
la ventana
*
the wall, the wall

viernes, 12 de febrero de 2010

Esther Seligson
José Ramón Enríquez

Era difícil Esther Seligson. Entrañable pero difícil. Estaba tan acostumbrada a la ignorancia de los jóvenes cuanto dispuesta a vencerla con su palabra, pero no soportaba la necedad ni esa petulancia de quien se siente exento de obligaciones en el terreno de la cultura. Su poesía, sus ensayos, su conversación toda exigían atención e inteligencia. Si para Cioran "un libro debe ser un peligro", para Esther traducir al pensador rumano fue una aventura espiritual de tiempo completo.
Sus investigaciones sobre la Kabbalah no eran el escarceo de una dilatante sino la entrega profunda de quien busca la Totalidad. Puedo afirmar sin miedo a equivocarme que Esther Seligson era una mística con todo lo que la palabra misticismo supone y exige. Hablé con ella suficientemente de Dios como para saberlo y viví cerca de ella momentos de dolor tan profundo y reacción tan genuina como para testificarlo. Alejada de las ortodoxias que se vuelven totalitarias e hipócritas, sabía de la fe y vivía rostro a rostro con la misma Presencia en la que ahora se encuentra idéntica y sonriente.
Nos entendíamos bien desde mi fe y la suya. La honestidad y la apuesta por vivir lo que la Vida tiene de inefable superan cualquier frontera teológica, y demuestran que la teoría no es más que la expresión en el lenguaje de una experiencia que lo trasciende todo.
Pícara, carnal, táctil y dulce, para ella el ser humano precisaba de un abrazo de un otro, y mucho de la catástrofe que vivimos, indiviudal y colectivamente, se debe a esa carencia de una otredad que nos dé su ternura.
No soportaba la prostitución en el arte, sobre todo en el teatro, que era su pasión, y no perdonaba la superficialidad que llena los escenarios. En El teatro, festín , al ir formulando preguntas fue enumerando los linderos múltiples del teatro para después definirlo:
"El teatro es ¿eterna búsqueda del misterio de la condición humana?, ¿incansable enfrentar los designios de los dioses?, ¿confrontación de modelos culturales y sociales para romper con ellos, perpetuarlos, rescatarlos?, ¿espejos de una identidad, ¿expresión de los dominios invisibles del hombre? Como la vida, la esencia del teatro es inapresable, un camino siempre virgen, un encuentro siempre terrible y salvaje con lo divino, porque divino es todo acto creador".
Es decir, Esther veía en el teatro un camino para la santidad y así lo explicaba al hablar de Grotowski: "Se trata de una santidad laica, así como de un teatro que tiende a la sacralidad sin ser necesariamente religioso". Por eso del actor esperaba tanto y por eso fue fundadora y maestra apasionada del Centro Universitario de Teatro de la UNAM. También por eso los chavos del CUT están desolados. Han perdido a quien creía en ellos y les exigía:
"El actor "santo" no se entrega al mejor postor; no se exhibe, no es autocomplaciente ni narcisista, no acumula trucos ni recetas para actuar, sino que trata de eliminar los obstáculos que su cuerpo opone al desarrollo y a la manifestación de su vida interior, de sus procesos psíquicos; no se conforma con la maestría adquirida sino que está siempre dispuesto a ir tras nuevas posibilidades, a empezar".
Entiendo la desolación de quienes se han quedado sin ella, pero no la comparto. Al igual que cuando hablamos sobre Adrián me dijo, sin retórica, que los dos sabíamos que él no se había ido, y tenía razón, así puedo yo decir a mis posibles lectores, sin retórica alguna, que Esther no se ha ido, y tengo razón.


*texto publicado en la columna: Pánico escenico, Reforma.

viernes, 5 de febrero de 2010


Una tarde de invierno en el Espacio Escultórico.

martes, 2 de febrero de 2010

María Candelaria
María Candelaria
María Candelaria
tres veces tu nombre
(aunque tu nombre sea otro)
¡Feliz cumpleaños!
Especialidad en Derechos Humanos
Facultad de Derecho, UNAM
tercer semestre
¡hoy inicia!

Datos personales

Mi foto
Vivo en Amsterdam 62. Bis.